lunes, 15 de diciembre de 2014

La prueba.

― Con esto damos comienzo a la cuatrocientos quinta reunión del Consejo de Estudios de Bondad Intrínseca de la Federación Galáctica, en el tercer ciclo galáctico desde la Concepción. El Canciller Ubutoh Gordanol del sector 103-V tiene la palabra ―recitó con fría voz la IA que presidía la reunión.
La sala estaba atestada de hologramas tridimensionales de los casi cien miembros del Consejo de Estudios de Bondad Intrínseca. La mayoría de los asistentes tenían una forma bípeda y se encontraban sentados en sillas comunes y corrientes, pero había unos cuantos con morfologías tan extrañas que llamar sillas a los objetos sobre los que estaban apoyados era un uso bastante liberal de la palabra.
Un sujeto de color verde pálido y cuatro ojos se puso de pie y se aclaró la garganta.
― Honorables miembros del consejo ―habló el tipo en una voz levemente distorsionada por el traductor universal―. Los he convocado en esta ocasión para hablar sobre un potencial nuevo miembro de la Federación Galáctica. Recientemente una raza del sector 325-A ha desarrollado los primeros pasos para la formación de un sistema de comunicación digital global. Por las convenciones establecidas en el acuerdo de Vuluvb, esto significa el fin del periodo de no-intervención y el comienzo de los Estudios Formales de Bondad Intrínseca ―el silencio reinaba en la sala ―. Estoy hablando de la raza auto-denominada humana del sistema Sol.
Un murmullo recorrió la habitación. La raza humana era especialmente polémica en los círculos intelectuales de ética y bondad intrínseca, solía escapar a muchas de las concepciones establecidas a través de cientos de años de estudios.
― El Delegado Skörn del sector 25-Z pide la palabra ―recitó la IA que presidía la reunión.
Un tipo azul con una multitud de tentáculos en la cabeza se puso de pie.
― Honorable consejo ―habló Skörn con la voz airada―. Pido formalmente la desestimación inmediata del caso en cuestión y la formación de un embargo comercial y cultural hacia la raza humana del sistema Sol. La raza humana es evidentemente no intrínsecamente buena. Existen precedentes para la formación de embargos así y creo que no podemos permitir que la Federación Galáctica se contamine con la violencia y deshonestidad de esos… simios.
Inmediatamente la sala explotó en una algarabía de gritos y acusaciones. La IA cortó las comunicaciones en cosa de segundos y el silencio reinó nuevamente. Los asistentes se calmaron, se sentaron en sus sillas y esperaron que volviera el audio.
― Miembros del Consejo ―comenzó a hablar la IA en unos momentos―. Si no reina el orden me veré forzada a cortar las comunicaciones nuevamente. ―La IA hizo una pausa y habló de nuevo―. El Ministro Lamek Totapalallam del sector 37-B pide la palabra.
― Miembros del consejo. No es justo juzgar a una raza entera por la acciones de unos cuantos. ―hablaba el ministro mientras gesticulaba con sus ocho brazos―. Y la raza humana parece ser excepcionalmente diversa en cuestiones de moralidad y ética. Propongo un estudio global, en dónde se determine la bondad de cada individuo de la raza humana. Es la única forma de determinar si están listos para pertenecer a la Federación Galáctica.
― El Duque Win Rar del sector 672-H pide la palabra ―dijo la IA―.
― Se me ocurre una idea. Aprovechando su reciente desarrollo digital global. ¿Por qué no desarrollamos un sistema de evaluación de bondad que se distribuya de manera discreta a través de las redes digitales? ―preguntó el tipo, intentando verse más alto que sus acotados ocho centímetros de altura ―. Podría ser una especie de servicio que la gente podría comprar, pero que de todas maneras se pueda utilizar sin pagarlo. Un servicio que apele a la bondad de la gente. Sólo la gente intrínsecamente buena pagaría por algo que sin embargo pueden usar de forma gratuita. Quizás si un porcentaje importante de la población es buena, digamos un 70%, podríamos darle una oportunidad a la raza humana de pertenecer al Consejo Galáctico.
Un ligero murmullo de aprobación recorrió la sala. La IA habló a continuación.
― El Duque Win Rar pide el voto sobre la moción propuesta.
Unos segundos después, apareció en una pantalla el resultado de la votación electrónica: Ochenta y siete votos a favor, seis votos en contra.
― La moción propuesta ha sido aprobada ―dijo la IA ―. El Canciller Ubutoh Gordanol del sector 103-V pide la palabra.
― Compañeros miembros del Consejo ―empezó a hablar el canciller―. Deberíamos ponernos a trabajar inmediatamente en este servicio, el cuál propongo nombrar en honor al buen Duque del sector 672-H que lo propuso. Doy por terminada esta sesión y nos juntaremos prontamente para discutir los resultados del estudio. Con suerte, si la raza humana demuestra su Bondad Intrínseca, tendríamos un nuevo miembro del consejo dentro de poco tiempo.




Unos meses después, en el planeta Tierra.
― ¿Oye Juan, cómo abro este archivo .zip?
― Necesitas un programa. Se llama Winrar, búscalo en internet.
― Uff, ¿pero cuánto cuesta? No tengo mucha plata en estos momentos.
― No, no te preocupes. No es necesario pagar, tiene un demo de tiempo ilimitado. Cuando lo usas aparece una ventanita preguntando si lo quieres comprar, pero en realidad ¿Quién pagaría por algo que se puede usar gratis?






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